Luego de mis dos días por la hermosa Múnich mi idea era ir para París, ya había encontrado un alojamiento lindo, dentro de mi presupuesto, con reserva cancelable sin costo, todo muy bien 10 y me puse a buscar tren. ¡Chan! Era un lío, con mi valija enorme tenía que hacer un transbordo medio complicado con solo 6 minutos para cambiar de andén, sumando en total muchas horas de viaje, todo en alemán = fiaca.
Entonces, cambio de planes: decidí nuevamente hacerme la improvisada y en donde debía hacer el transbordo me quedé un día: Stuttgart 🤔

Nunca había escuchado hablar de esa ciudad, me puse a googlear y lo que encontré fue lo siguiente: un equipo de fútbol local medio famoso, museos de autos top como Mercedes Benz, Chrysler y Porsche, algunos viñedos, castillos en la periferia, la Staatsgalerie, mucho verde, arquitectura interesante…
Bien Stuttgart, para pasar un solo día y evitarme un viaje muerte, sos buen plan. ¡Allá voy! 🚂

Hallo Stuttgart!

Conseguí un hostel ridículamente barato, feucho, estilo reformatorio juvenil, con una ubicación medio medio pero para una noche y mi 💰estaba ok.  

Al llegar me topé con la primera gran enseñanza del viaje: ¡siempre preguntar si hay ascensor! (¡malditas escaleras europeas!) Obviamente no pregunté y ascensor no había, so: 4 pisos por escalera con la monster bag 🤬 –> Enojo –> ducha –> fuera enojo –> y a conocer la ciudad.

A Caminar 🚶‍♀️

Es una linda ciudad, es la 6ta mas grande de Alemania, tiene su Schlossplatz (plaza del castillo) ¡¡¡¡enoooorrrrmeee!!!! Allí se puede visitar el Palacio Nuevo y el Castillo Antiguo, encontrás pastito cuidado limpito que invita a armar un tremendo pic-nic. 🥪

Una de las calles laterales esta llena de bares y lugares para picar algo. Pregunté por las comidas títpicas y me dijeron que pruebe Maultaschen, una especie de raviol relleno de salchicha (¡siempre presente!) y espinaca que te lo sirven en una de sopa de cebolla y panceta con huevos revueltos pero como que too much. Me terminé comiendo un currywurst de paso (que nunca te falla) y seguí mi camino. 🌭

En frente de la plaza se encuentra el Museo de Arte Contemporáneo (Kunstmuseum Stuttgart) que es como un cubo grande estilo Apple Store que se ve muy bonito de noche (y de día también.) 🍏

En el medio del parque hay un lago, músicos en vivo y distintas actividades culturales que van cambiando según el día, bien, entretenido. 🤸🏼‍♀️
En frente de este lago se ve la Ópera Estatal de la ciudad que tiene como sede el Teatro Estatal. El edificio es una maravilla con capacidad para 1399 espectadores (que ganas de no redondear el número, ¿no?) y fue uno de los pocos edificios que no destruyó la Segunda Guerra Mundial.

Staatsgalerie

Seguí caminando y me topé con mi objetivo: La Galería Estatal (Staatsgalerie). El edificio original fue bombardeado en la Segunda Guerra Mundial y reconstruído en 1948. En el mismo lugar se puede visitar la Neue Staatsgalerie diseñada por el arquitecto James Stirling con una apuesta tirando al posmodernismo que fue muy criticada por sus colegas pero aceptada por el público en general. (a mi me re gustó también 👍🏽) 

El edificio me encantó, el ala moderna, llena formas irregulares y mucho color conviven de 10 con el ala antigua.
La expo permanente super completa, y me enamoré de la «Cleaning Lady» (1972) de Duane Hanson, una escultura hiperrealista al estilo Ron Mueck que me dejó hipnotizada, un nivel de detalle que impresiona. Cuando entré a la sala no podía creer que quien estaba ahí en el piso no era un ser humano. 🤯

Y de yapa una sorpresa que nunca creí ver en vivo, estaban los trajes del Triadisches Ballett (1922) de Oskar Schlemmer. Flasheada que en una parada no planificada iba a terminar viendo parte de esta obra que me vuelve loca.
🍀LA SUERTUDA ME DICEN 🍀
Con esto Stuttgart se ganó mi 💚

Dejo videito pa quienes no la vieron:

Salí del Museo ya al atardecer y me recomendaron una calle: Koenigstrasse, yo no soy muy fan del shopping pero es un paseito lindo para caminar un rato, lleno de tiendas de todas las marcas conocidas (las «accesibles» y las super topísimas que duele hasta mirar la vidriera.) Me comentaron que también hay varios shoppings pero preferí seguir perdiéndome por las calles de la ciudad hasta que caiga la noche.
Otro plan que no hice fue las excursiones a los viñedos, supongo que si conocés Mendoza ya es suficiente con el tema vino… 🍇🍷

En conclusión, si andan cerca yo aconsejaría un vuelta por esta ciudad, no se si más de un día ya que si arrancas bien temprano se pueden recorrer todos los puntos más interesantes a no ser que seas fan de los «fierros» y tengas ganas de visitar las fábricas y museos de Mercedes Benz, Chrysler y Porsche.
De pasada, de imprevisto, para mi fue un buen plan, y luego de esta parada continué mi camino a la bella París.
Oh là là! 🇫🇷